Reclutamiento digital: cómo el crimen organizado atrae a adolescentes en redes sociales
Universidad de las Ciencias
Vivimos en una época en la que los dispositivos electrónicos y las redes sociales forman parte de la vida cotidiana de niñas, niños y adolescentes. No obstante, estos espacios digitales también se han convertido en lugares de riesgo. En México, el fenómeno del reclutamiento de menores por parte de grupos del crimen organizado ha cambiado de forma significativa: ya no ocurre únicamente en las calles, ahora los grupos delictivos aprovechan las redes para atraer a los jóvenes. Aunque no existen cifras precisas, se estima que alrededor de 30 mil jóvenes han sido incorporados a las filas del crimen organizado (REDIM, 2019). Este artículo busca explicar cómo ocurre ese proceso, por qué afecta a los adolescentes y qué papel tiene el sistema de justicia juvenil en este desafío.
¿Qué tan grave es el problema en México?
El reclutamiento de niñas, niños y adolescentes por parte del crimen organizado es una crisis nacional que combina elementos como la desigualdad, la violencia y la vulnerabilidad. Investigaciones recientes dimensionan su alcance:
- El impacto social del reclutamiento de adolescentes por parte del crimen organizado se agrava por la precariedad económica que enfrentan millones de jóvenes en México. De los más de 31 millones de personas de entre 15 y 29 años, cerca de 15.9 millones tienen empleo, pero con un ingreso promedio de apenas 33.8 pesos por hora (INEGI, 2024).
- De acuerdo con la organización Reinserta (2022), la edad promedio en las que los grupos criminales comienzan a reclutar a la niñez oscila entre los 9 y los 11 años. Aproximadamente, 250 mil niñas, niños y adolescentes estarían en riesgo de ser incorporados a estos grupos.
- Un estudio del Colegio de México (2025) identificó, al menos, 100 perfiles en TikTok vinculados con actividades de reclutamiento criminal, venta de armas y trata de personas. Estos perfiles hacen uso de promesas laborales, emojis, hashtags y música mexicana para atraer la atención de jóvenes y normalizar la violencia.
Hay varios factores que hacen que muchos jóvenes sean vulnerables al reclutamiento digital, como falta de oportunidades económicas o educativas y la carencia de un sentido de pertenencia. El uso excesivo de dispositivos digitales y la poca supervisión, así como la marginación, la violencia en el entorno familiar y la falta de acompañamiento también son factores que pueden poner en riesgo a los adolescentes. Consulta el siguiente artículo de nuestro blog para ahondar en el tema.
¿Cómo funciona el reclutamiento digital?
Actualmente, las estrategias de los grupos del crimen organizado para atraer a menores se centran en las aplicaciones digitales que los jóvenes utilizan con naturalidad, como redes sociales, videojuegos en línea y aplicaciones de mensajería. Un informe de la Secretaría de Gobernación (SEGOB, 2021) señala que los menores de entre 6 y los 17 años están siendo contactados a través de plataformas como TikTok, Instagram, videojuegos como Free Fire, Fortnite e, incluso, grupos de chats privados. Algunas de las tácticas que emplean incluyen:
- Promesas de “trabajo” con buen salario, regalos, reconocimiento o sentido de pertenencia.
- Análisis del perfil digital del menor, lo que incluye gustos, juegos, redes de amigos y vulnerabilidades.
- Uso de lenguaje, memes, emojis o música que conectan con la cultura juvenil, generando una aparente cercanía.
- Amenazas indirectas a familiares o a personas cercanas para forzar la colaboración.
Una vez que se establece el contacto, el menor puede comenzar desempeñando funciones “ligeras” (mensajero, halcón, transporte) y, en algunos casos, escalar hacia roles más peligrosos (vigilancia, extorsión digital, desaparición de personas).
La justicia para adolescentes en México: el menor como víctima e imputado
En México, existe un marco legal establecido por la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes (LNSIJPA) que indica la manera de proceder cuando un adolescente es detenido por participar en actividades vinculadas al crimen organizado. En este marco se reconoce que las personas menores de 18 años no deben ser juzgadas conforme al Código Penal común, sino a través de procedimientos adaptados a su edad, desarrollo y derechos humanos.
En este modelo, el Estado asume que muchos adolescentes involucrados en delitos graves son también víctimas. Por ello, el enfoque no busca solamente sancionar, sino también fomentar la reintegración social y la reparación del daño, considerando el contexto de vulnerabilidad. Las medidas que puede dictar el sistema van desde la libertad condicionada, la orientación familiar, la atención psicológica y educativa, hasta el internamiento en centros especializados.
Creando redes de prevención y protección
La solución a este problema no puede recaer solamente en el sistema de justicia penal. Luchar contra el reclutamiento digital es una tarea de prevención, educación y responsabilidad compartida. ¡Ojo! No se trata de “satanizar" las redes sociales, sino de brindar a las y los adolescentes herramientas para que aprendan a navegar en ellas de forma segura. Algunas estrategias en este sentido son (Reinserta, 2022):
- El rol fundamental de la familia: es importante fomentar un diálogo abierto sobre lo que niñas, niños y jóvenes ven en internet. Preguntar, por ejemplo, “¿qué influencers sigues?” o “¿has visto algo raro o que te haya hecho sentir incómodo?” es más efectivo que espiar o prohibir. Además, los cambios bruscos de comportamiento, la posesión de dinero o objetos sin explicación, y el desinterés por actividades habituales pueden ser indicadores de alarma.
- La escuela como institución relevante: es importante enseñar a los jóvenes a identificar fake news, perfiles falsos, discursos de odio y estrategias de manipulación emocional. Además, es indispensable fortalecer habilidades como la autoestima, la gestión emocional y la resolución de conflictos.
- La comunidad como una red de protección: la oferta de actividades deportivas, culturales y formativas debe ser accesible y atractiva. Vecinos, líderes comunitarios y organizaciones civiles deben estar informados para detectar situaciones de riesgo y activar protocolos de protección, rompiendo así con la indiferencia.
Reflexiones finales
El reclutamiento digital de adolescentes por parte del crimen organizado muestra que la frontera entre lo virtual y lo real se vuelve cada vez menos nítida. Las redes sociales, los videojuegos y las apps además de ofrecer entretenimiento, actúan como puertas de entrada a dinámicas criminales que afectan vidas humanas. Por ello, es fundamental que los estudiantes, la escuela, las familias y el sistema de justicia trabajen de la mano. El conocimiento, la vigilancia conjunta y la cultura de prevención pueden marcar una gran diferencia.
Referencias
- Colegio de México. (2025). Nuevas fronteras en el reclutamiento digital: estrategias de reclutamiento del crimen organizado en TikTok. México.
- Instituto Nacional de Estadística y Geografía [INEGI]. (2024). Estadísticas a propósito del Día Internacional de la Juventud. INEGI. https://www.inegi.org.mx/app/saladeprensa/noticia/9227
- Red por los Derechos de la Infancia en México [REDIM] (2019). Reporte Anual “Infancia y Adolescencia en México”. REDIM. https://derechosinfancia.org.mx/v1/
- Reinserta (2022). Niñas, niños y adolescentes reclutados por la delincuencia organizada. Reinserta https://reinserta.org/wp-content/uploads/2023/10/ESTUDIO-RECLUTADOS-POR-LA-DELINCUENCIA-ORGANIZADA.pdf
- Secretaría de Gobernación [SEGOB]. (2021). Mecanismo Estratégico del Reclutamiento y Utilización de niñas, niños y adolescentes por Grupos Delictivos. SEGOB.

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