4 tips para escribir efectivamente
Autora: Mtra. Paloma Prado Robledo
En la década de los sesenta, múltiples investigadores identificaron que las y los escritores más efectivos no solo dominaban aspectos del código escrito, como la gramática; sino que llevaban a cabo diferentes pasos para garantizar la calidad de sus creaciones (Cassany, 1988).
¿Qué es la escritura efectiva?
Alred, Brusaw y Oliu (2009) señalan que la escritura efectiva no es producto de la inspiración o la casualidad, sino que es un proceso a través del cual el pensamiento se transforma en palabras escritas (Coronado, 2021). Dicho proceso se desarrolla a través de varias etapas: planificar, redactar y revisar.
1. Una idea para cada tema y cada idea en su lugar: planificar
La planificación involucra tres subprocesos o pasos: buscar información, generar ideas y organizar y jerarquizar.
Buscar información. Antes de redactar, es indispensable buscar información acerca de las características del tipo de texto a elaborar, así como identificar algunos modelos de escritura. También es importante documentarse sobre el tema a desarrollar. ¡Recuerda! Las fuentes en las que se fundamente el texto deben ser fidedignas y confiables.
Generar ideas. Una buena opción para comenzar la planificación de un texto es elaborar una lluvia de ideas (Sotomayor, Ávila y Jéldrez, 2015). Esto implica hacer un listado de todos aquellos puntos que se tratarán en el texto. Para ello, se pueden utilizar múltiples herramientas digitales como Jamboard, Stormboard o Popplet.
Ordenar y jerarquizar. Una vez escritas las ideas, habrá que ordenarlas y jerarquizarlas, es decir, se debe determinar cuáles son las ideas principales, cuáles son las secundarias y cómo se relacionan entre sí. Este proceso se llama esquematización y, para realizarlo, es útil elaborar organizadores gráficos: mapas conceptuales o mentales, cuadros sinópticos, etc. Hay múltiples aplicaciones que ayudan a generar este tipo de recursos: Canva, Visme, LucidChart y Creately.
2. Lo más claro es lo más sencillo: redactar
Ahora es momento de redactar. Para ello, hay que tomar como punto de partida el esquema elaborado previamente. Durante la etapa de redacción, es importante cuidar y priorizar la claridad. Se puede lograr mediante las siguientes estrategias:
Es recomendable que, en cada párrafo, se desarrolle, únicamente, una idea, ya que esto garantizará la claridad del texto.
Lo mejor al redactar un texto es optar por el uso de oraciones simples, es decir, aquellas que incluyen: sujeto + verbo + objeto.
Los marcadores discursivos son palabras o conjuntos de palabras que indican la relación entre dos ideas. Utilizarlos adecuadamente es indispensable para asegurar la efectividad de la escritura.
3. Aprender de los errores y volver a empezar: revisar
Una vez que se escribe un texto, es necesario revisarlo para asegurar que se ha estructurado adecuadamente. Hay múltiples estrategias para llevarla a cabo:
Revisión en etapas: revisar un texto es una tarea compleja, por lo que es recomendable llevar a cabo esta tarea por etapas. Se requerirá leer varias veces el escrito y, en cada lectura, revisar y corregir diferentes aspectos.
Esquematización inversa: otra estrategia para revisar un texto consiste en llevar a cabo una esquematización inversa. Esto implica desarmar o deconstruir el texto, mediante la identificación de la idea principal de cada párrafo y su posterior análisis, para cotejar si el orden, la estructura y secuencia de cada párrafo y cada apartado son las más adecuadas.
La escritura es un proceso de ida y vuelta. Esto significa que, a partir de la revisión, será necesario volver a la redacción o, incluso, a la planificación del texto.
4. La práctica hace al maestro: lectura y escritura
Las y los escritores más competentes elaboran textos con frecuencia y, con ello, perfeccionan sus habilidades de escritura y definen su estilo, pero, además, son grandes lectores, pues lectura y escritura están estrechamente relacionadas.
En la UDC, ofrecemos una educación de alta calidad que fortalece las competencias básicas y para la vida de las y los estudiantes, entre ellas, la lectura y la escritura, a fin de preparar a las y los egresados para enfrentar los desafíos de las sociedades del conocimiento. Te invitamos a conocer nuestros programas formativos:
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Referencias bibliográficas
- Cassany. D. (1988). Describir el escribir. Cómo se aprende a escribir. Paidós.
- Sotomayor, C., Ávila, N., y Jéldrez, E. (2015). Rúbricas y otras herramientas para desarrollar la escritura en el aula. Santillana
- Coronado, S. P. (2021). La escritura académica en la formación universitaria. Educare Et Comunicare: Revista Científica de la Facultad de Humanidades, 9(2), 5-16. https://doi.org/10.35383/educare.v9i2.653
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